Arquia cumple su 30 aniversario alcanzado una dimensión y una solvencia que le han permitido, en 2012, superar todos los requisitos exigidos al sector financiero que han acabado con la mayoría de cajas de ahorros.
La solvencia es uno de los puntos fuertes de la entidad. Al acabar 2012 los recursos propios computables eran de 76 millones, con un ratio de solvencia del 15,32% frente al 9% exigible.
La Caja ha realizado todas las provisiones exigidas por los llamados “decretos Guindos”, que le han supuesto cargos por provisiones de 11,9 millones de € en su cuenta de resultados, y aún así ha terminado el ejercicio con un excedente, antes de impuestos, de 7,3 millones, un 36% más que el año anterior.
El volumen de negocio es de 1.642 millones de €, de los que 605 son operaciones de crédito y el resto pasivo y fondos gestionados.
El impacto de la crisis sobre la actividad principal sobre sus clientes arquitectos ha provocado que la tasa de morosidad en 2012 haya acabado en el 9,80%, porcentaje que aún es inferior al de la media del sector financiero. Esta morosidad la tenemos cubierta con provisiones que equivalen a un 61,5%, situando el grado de cobertura por encima de la media de la banca.
La red de la Caja es de 26 oficinas, situadas en las principales provincias del territorio. Pero a través de internet 32 mil clientes, desde todo el mundo, hicieron 700 mil operaciones en el año. Al final del ejercicio la Caja daba servicio a cien mil clientes, de los que 23 mil eran socios.
En estos 30 años Arquia se ha consolidado como una entidad solvente, que presta eficientemente servicios financieros a sus socios y clientes en el presente y que los seguirá prestando en el futuro.