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Filantropía, en el punto de mira de la banca privada

Arquia Inversión
26 noviembre 2018

Los clientes de banca privada solicitan cada vez más a sus entidades servicios de asesoramiento en filantropía y ellas atienden esta demanda creando iniciativas que apoyan proyectos sociales a través de diferentes vehículos de donación. El interés de ambas partes por las causas justas es cada vez mayor porque la filantropía «es rentable».

La «generosidad y las ganas de contribuir a construir un mundo mejor» son las principales motivaciones de los propietarios de altos patrimonios cuando demandan a sus bancas privadas que les ayuden a identificar proyectos filantrópicos y a encontrar la forma más eficiente de hacerlos realidad, con resultados concretos y medibles, afirma Jordi Casajoana, director de Colectivos de Valor y Filantropía de CaixaBank. 

Y es que cada vez son más las entidades de banca privada que son conscientes de la importancia de la rentabilidad social de la filantropía y, por ello, se están comprometiendo con iniciativas sociales, desarrollando productos de inversión con impacto social y apoyando iniciativas altruistas de sus clientes, siguiendo el ejemplo de las bancas privadas anglosajonas.

Este es el caso de CaixaBank, que dispone de un equipo específico y de una propuesta para el asesoramiento en filantropía llamada 'Proyecto de Valor Social' que, según fuentes de la entidad, «ofrece una solución integral a las necesidades y objetivos que nuestros clientes de banca privada puedan tener en los ámbitos de la filantropía y la inversión socialmente responsable». Con ella ponen a disposición de sus clientes información, formación, conocimiento y vehículos para que puedan construir su propio proyecto de valor social, «con un enfoque de la filantropía que entronca con los planteamientos más actuales basados en la filantropía estratégica», asegura Casajoana. 

Esta iniciativa fue uno de los motivos que llevó a la entidad a ser reconocida por Euromoney como Mejor Banca Privada de España en Asesoramiento Filantrópico y de Inversión Socialmente Responsable los cuatro últimos años.

Asimismo, está incorporando cada vez más productos basados en la Inversión Socialmente Responsable tradicional. «Este año hemos comercializado entre nuestros clientes de Banca Privada dos vehículos de capital riesgo de impacto social, uno centrado en la eficiencia energética y otro en las energías alternativas», informa Jordi Casajoana. 

También ayudan a sus clientes a diseñar proyectos filantrópicos a medida. «Les ofrecemos la posibilidad de colaborar con un proyecto apoyado desde hace diez años por la Fundación Bancaria 'la Caixa'», afirma el directivo. Se trata de la Alianza para la Vacunación Infantil, que colabora con la Alianza Mundial para Vacunas e Inmunización (GAVI), cuyo objetivo es aumentar el acceso a la vacunación de los niños de los países más desfavorecidos. «La Fundación Bancaria 'la Caixa' y la Fundación Bill y Melinda Gates multiplican por 4 el importe de las donaciones hechas por nuestros clientes, realizando aportaciones paralelas y consiguiendo, así, cuadruplicar los esfuerzos contra la mortalidad de los niños», apunta el director de Filantropía de CaixaBank. 

También este año han convocado los Premios de Filantropía CaixaBank Banca Privada para premiar los mejores desempeños de sus clientes en esta materia en las candidaturas de 'Mejor Proyecto' y 'Mejor Trayectoria'.

FUNDACIONES 

Una forma de vehiculizar el compromiso social de los millonarios es a través de la creación de fundaciones. Según datos del Instituto de Análisis Estratégico de Fundaciones, el sector fundacional español está constituido por 8.866 fundaciones activas, que emplean a 240.000 trabajadores y dedican 8.000 millones de euros a proyectos. Asimismo, atiende a 35,62 millones de beneficiarios y el origen de sus recursos es mayoritariamente privado. Más de un 80 por ciento procede de legados, donaciones y actividades de tipo económico.

Ayudar a sus clientes a crear fundaciones es una de las actividades llevadas a cabo por el Grupo Edmond de Rothschild. En opinión de Antonio Salgado, consejero delegado de la entidad en España, «se está produciendo una revolución en el concepto de filantropía que tienen las familias clientes de banca privada. Están evolucionando de la caridad a la inversión responsable». 

La familia Edmond de Rothschild tiene diez fundaciones en todo el mundo y una de ellas está en España. «Para nosotros es un orgullo esa presencia», reconoce Salgado, para quien el compromiso de la familia Rothschild con el impulso de grandes proyectos filantrópicos está integrado en el ADN del grupo. 

Desde su banca privada promueven, por un lado, que las familias con las que trabajan creen fundaciones o que se interesen por la inversión responsable y, por otro, que las fundaciones familiares colaboren y creen un entorno donde se pueda dialogar «para juntos avanzar y crear la filantropía del siglo XXI», reconoce Salgado.

Otra entidad que apuesta por la filantropía es Arquia Banca, a cuya fundación destina el 30 por ciento de su beneficio neto. «Nuestra fundación lleva a cabo una importante labor social en colaboración con entidades como Cruz Roja o Atades», señala Javier Navarro, presidente de la entidad. Estas iniciativas salen 'rentables' a la banca privada, ya que en el caso de Arquia Banca, «los clientes valoran mucho nuestra fundación y esto prestigia a la entidad», dice Navarro. 

También Sabadell Urquijo Banca Privada se ha propuesto apoyar causas justas y colabora económicamente en proyectos sociales de acogida a mujeres en situación de riesgo y asistencia a niños y ancianos. Según reconoce Pedro Dañobeitia, su director general, «la filantropía es clave para nosotros. A los proyectos éticos y solidarios les damos una importancia enorme. Estamos en una situación en la que podemos ayudar, en la que tenemos acceso a instituciones, a clientes y a inversores que quieren ayudar a través nuestro, con unos procesos y con una supervisión para que todas esas ayudas, a través de un comité, lleguen a buen puerto. Este es nuestro pequeño grano de arena para asistir a los más necesitados». 

Al contrario de lo que se podría pensar, no son los incentivos fiscales derivados de la filantropía lo que lleva a los clientes de banca privada a apoyar proyectos solidarios. Según expertos del sector, muchos de ellos quieren dar un sentido a su éxito invirtiendo en las sociedades que los acogen. Así lo reconoce Antonio Salgado al asegurar que «no conozco a ningún cliente en España que haya hecho una fundación o realizado una inversión en filantropía movida por motivos fiscales» y, afirma rotundo: «Pongo la mano en el fuego por ello». Afirma que practican la filantropía sin necesidad de incentivos: «Las nuevas generaciones de estas familias están más preocupadas por intentar cambiar la sociedad que por ganar dinero».

Jordi Casajoana es de la misma opinión: «Los incentivos fiscales pueden ayudar, pero en ningún caso son determinantes». Respecto al reconocimiento social que les puede acarrear estas acciones cree que no siempre se da, al contrario de lo que ocurre en el mundo anglosajón, de hecho, «parte de nuestros clientes prefieren mantener la discreción respecto a su actividad filantrópica».

(2018, 23 de noviembre). Filantropía, en el punto de mira de la banca privada. Inversión y finanzas. Por Esther García López. 
Recuperado de http://www.finanzas.com/noticias/economia/20181123/filantropia-punto-mira-banca-3949192.html.