Los expertos no se cansan de advertirlo: invertir en emergentes es optar por estrategias de gran volatilidad y, por tanto, acompañadas de riesgos; sin embargo, precisamente estas características hacen que cuando se da en la diana las ganancias sean realmente jugosas sobre todo a largo plazo.
Ramón Cirach, portfolio manager de Arquia Gestión, cree que “cualquier estrategia de inversión debe incluir en mayor o menor medida un porcentaje de activos de economías emergentes, independientemente de su perfil de riesgo”, y propone hacerlo en compañías cotizadas en esos mercados, “o bien podemos invertir en compañías europeas o norteamericanas con intereses en dichas economías”.
Si analizamos los fondos de renta variable que mejores rendimientos están dando a medio y largo plazo, nos encontramos casos como el Templeton Emerging Markets Smaller Companies, el Schroder ISF Emerging Europe o el Raiffeisen-Russland-Aktien, todos con rentabilidades que superan en diez años el 207%.
Entre ellos llama la atención el vehículo de la gestora Templeton, que no solo lidera la clasificación a una década con un retorno del 285%, sino que a cinco años consigue también estar entre los diez mejores gracias a ganar un 60%. La clave, la inversión en compañías de pequeña capitalización, empresas de mercados emergentes o en firmas que obtengan una importante parte de sus ingresos de mercados emergentes.
También a cinco años la gestora cuenta con el Templeton BRIC, que invierte, al igual que muchos de los fondos que aparecen en estas clasificaciones, en compañías de Brasil, Rusia, India y China, es decir, en los países denominados en conjunto BRIC o BRICS si se añade a Sudáfrica.
Schroder también ofrece varios fondos entre los más rentables a distintos periodos. El mencionado ISF Emerging Europe es plata a diez años, con una revalorización del 213%, mientras que el Schroder ISF Middle East gana un 198% en la década y el Schroder ISF BRIC es subcampeón a cinco años, con un 77%.
Tom Wilson, responsable de Bolsas de mercados emergentes, auguraba a finales de año que la renta variable emergente basaría su rentabilidad en 2019 en “la debilidad del dólar estadounidense, un desenlace mejor de lo esperado de las relaciones comerciales entre Estados Unidos y China y la atenuación de los temores sobre el crecimiento del gigante asiático”. Además, en cuanto a las valoraciones de las compañías, en general le parecían interesantes, “y tanto la ratio precio/valor contable como la ratio precio/beneficio se sitúan por debajo de sus medias a largo plazo”.
También destaca Robeco con el Emerging Stars Equities (206% en la década) y Robeco Emerging Markets Equities (59% a cinco años). Precisamente, hace solo unos días Fabiana Fedeli, responsable global de activos fundamentales de la gestora holandesa, aseguraba en un comentario sobre la guerra comercial entre Estados Unidos y China que, “hace seis meses, el mundo estaba convencido de que no habría solución. La solución se va a producir; puede que no sea perfecta, pero será suficiente para hacer que los mercados bursátiles se relajen un poco más”, y añadía: “En muchas ocasiones, invertir en mercados emergentes requiere de nervios de acero”.
En cuanto a Goldman Sachs AM, además del BRICS Equity Portfolio, liderando el ranking al quinquenio (80%), ofrece el Goldman Sachs Emerging Markets Equity Portfolio, que gana casi un 57%.
Otros fondos destacables son el Raiffeisen-Russland-Aktien, de la gestora austriaca RCM y centrado en las acciones de los sectores de la energía en Rusia y países como Kazajistán y Ucrania, que es el tercero más rentable a diez años.
O el JPM Emerging Markets Small Cap, que ofrece crecimiento a largo plazo mediante inversión en sociedades de mercados de reciente aparición con baja capitalización.
Ramón Cirach (Portfolio manager de Arquia Gestión). 11 de abril de 2019 - Lo que rentan los BRIC y los valores de pequeña capitalización. Cinco Días. Por Vera Castelló.
https://cincodias.elpais.com/cincodias/2019/04/10/mercados/1554916248_850416.html